Capitulo 9
Inicio de la Pesadilla
Que tus problemas se vuelvan pesadillas es lo peor que te puede pasar si no abres los ojos y ves la realidad
Carla POV
Llegue hasta más temprano de lo común, mi impaciencia por ver a Joel me había ganado. Cuando llegue fui casi de las 5 primeras en llegar al laboratorio; me senté en mi banca de siempre. Veía como entraban de uno a uno mis compañeros, pero entre ellos no llegaba el que más deseaba que entrara y pudiera hablar con él y para pedir su perdón.
Llego el maestro y no llego él; casi me da el infarto cuando no lo vi. Me pase toda clase descartada, porque estaba ausente hoy. Por poco y me quemo con acido sulfúrico al estar poco atenta en la clase, que con eso conllevo un regaño monumental por departe del maestro.
Al terminar harta del regaño me quite la bata haciendo bola en la bolsa y me encamine sola al salón cuando vi a Joel llegando al salón, voltio y al verme giro la mirada para otro lado. Mi corazón sentía que se detuvo por un momento al ver que ni una mirada me podía dirigir. Cuando estuve cerca de él se puso muy efusivamente a charlar con Mónica. Puse mi mejor sonrisa y seguí caminando a mi lugar.
La clase más larga de la historia, mirando como tonta a Joel; pero mi sufrimiento por este rato terminaba. Me acerque a hablar con Joel.
— Joel podemos hablar –Pedí.
— Al rato, tengo hambre... aun puede esperar...
Cuando enfrente de mi apareció Ángel, el sabia aparecerse en los momentos menos adecuados.
— Almorzamos juntos –Dijo sin importarle Joel.
Eso basto para que Joel se fuera encolerizado.
— Claro que no –Intente con todas mis fuerzas no gritar.
— Después de cómo te trato ayer, se lo merecía.
— No... iba hablar con él.
Lo quite de mi camino con un empujoncito y salí disparada hacia el salón de Carol y Sara.
— ¿Quién te persigue? –Bromeo Carol.
— Vienes corriendo, ¿Qué paso?
Estaba a punto de contarles todo cuando me detuve a pensar. Como podía decirle a Sara que salí con Ángel, le rompería el corazón y sé que ella no entendería que nada mas salimos en plan de amigos. No le podía decir nada, como podía explicar que Joel estaba enojado. Esto se estaba volviendo una red de mentiras. Odio las mentiras, pero esta por ahora era necesaria o eso creía.
— Nada.... solo ando imperativa –Di pequeños brinquitos.
— Si se nota -Dijo Sara.
Salimos del salón y fuimos a la cafetería, de milagro Sara pidió algo mucho para comer ella sola, hoy había amanecido hambrienta. Yo solo compre un sándwich de jamón que solo mordisquee. Me miraron raro las dos cuando tire casi completo el sándwich, pero aun así se guardaron los comentarios para ellas mismas.
Me despedí de ellas sin ánimo, prometiendo vernos a la salida. Entre al salón solo viendo mi asiento y nada más. Nuestra clase empezó y puse toda la atención que pude en el pizarrón.
Este día se me hacía más largo a cada momento que pasaba y mas tratando de no ver a Joel a la distocia. Cuando toco la campana de mi salida, falto la maestra y eso nos dejaba sin clases: habíamos tenido muy pocas clases este día que mejoraba a cada momento.
Salió disparado Joel del salón, no podía perderlo de vista; tome mis cosas como pude y corrí tras él. Me empezaba a faltar el aliento cuando por fin lo alcance.
— Joel -Grite con mi último aliento.
— Mande –Respondió cortante.
— Necesitamos hablar –Proseguí, ignorando su tono de voz.
— ¿necesitas? –pregunto sarcásticamente.
— Si que necesitamos
— Habla
— Tengo que explicarte lo que sucedió el sábado.
— Porque me lo tendrías que explicar –Giro la mirada-¿Quién soy para que me tengas que dar explicaciones?
Agite la cabeza incrédula, ¿Quién era él?
— Eres a la persona que amo eso eres -dije, que me quería decir algo pero lo pared –Déjame terminar –Se me quedo mirando por un minuto y seguí –No fue una cita lo que paso con Ángel, solo salimos como amigos –Recalque la palabra amigos –aposte con el que Carol y Sara pasaban y no lo hicieron y eso fue la apuesta –Agarre con fuerzas mi bolsa.
— No soy un crio -Me echo en cara.
— Que poca fe me tienes –señale con tristeza –porque jugaría contigo que me gano
— No sé que puedas tener en tu mente retorcida –Por un momento me alegro volver a oír un poco de la bromas de Joel o eso creí que era, pero las siguientes palabras cambiaron mi opinión –yo no sé qué trames.
— No tramo nada –Me hizo enojar –Yo solo quería hablar contigo, no me gusta pelearme contigo... que no vez cuanto me duele ver cómo me trataste –delante de él no derramaría una lagrima –Ese día te suplique que me escucharas si quiera un momento y que hiciste tu –Di un paso para atrás –Me dejaste hablando...
Le avente mi bolsa y salí corriendo, ya me había cansado de darle explicaciones que él no quería escuchar. A él no le importa. Corrí por más de tres cuadras seguidas, pare para respirar. Mis lágrimas nublaban mi vista, que no vi venir lo que seguía.
Unas manos sucias me envolvieron, con una me tapo la boca y con la otra me intentaba jalar por lo que veía a un auto. Mordí su mano, con tanta fuerza como pude. Un codazo le di a las costillas, librándome por un momento de aquel extraño.
Me intento agarrar de nuevo, pero antes que me pudiera aprisionar de nuevo le di una patada en los bajos. Corrí de nuevo a la escuela, cuando choque contra alguien. Pensé que era otra vez ese extraño que me había alcanzado. Me intente zafar de amarre cuando una voz conocida me hablo.
— Tranquila Carla –Me abrazo -¿Qué te paso? ¿Porque vienes así?
— Carla que te paso –dijeron Carol y Sara.
Respiraba entre cortada y fue cuando me desmaye.
JOEL POV
Me aventó su bolsa y corrió, tarde unos momentos en salir tras de ella. En una vuelta la perdí de vista; no supe para donde se había dirigido. ¡Dios me sentía como un idiota! Que le había hecho a mi Ángel, jure que nunca la haría llorar y que hacia desconfié de ella.
Cuando la volví a localizarla la vi correr de nuevo hacia la escuela. Crecía mi desesperación por alcanzarla, cuando me detuve de repente ahí estaba en brazos de Ángel....
Ignore a Ángel y me acerque, estaba pálida.
— ¿Qué le paso? –Le pregunte a sus amigas.
— No sabemos llego llorando.... y de repente se desmayo.... –Me informo Sara.
— La llevare a su casa –anuncio Ángel.
Sus amigas intentaron protestar, les di su bolsa y me aleje de ellas. La subió a un coche color plata y se fue. Esto es mi culpa.
Carla POV
Me desperté en la sala de mi casa, cubierta por una manta. La cosa se ponía más extraña con Ángel observándome. Me moví instintivamente para el lado contrario del sillón.
— ¿Que haces? –pregunto dejando la revista que estaba leyendo.
— Bueno esa misma pregunta te la hago a ti
— Bueno leo esperando que despiertes –Se acerco y toco mi frente –Creo que ahora estas mejor, pero ahora me explicaras que paso hace rato
Al principio me dio pena decirle lo que paso, desde la conversación con Joel hasta cuando el extraño me intentaba atrapar.
— Salí corriendo como pude -apretaba la manta entre mis manos.
Se quedo pensativo un momento, eso me puso nerviosa. Que tramaba este chico, mi curiosidad me gano y termine por preguntarle.
— ¿Qué piensas?
No me contesto en lugar de eso fue a la cocina y vino con unos chocolates. ¿Cómo sabia donde estaban?
— Como te hará bien –Me lo lanzo.
— Normalmente la gente no diría eso, pero me sirve.... –Me interrumpió.
— Porque eres anémica desde pequeña -Me le quede viendo, ni quiera Sara y Carol sabían eso de mí. Ese era mi pequeño secretito.
— Si... ¿Cómo sabes eso? –empezó jugar con las manos.
— Me lo dijo Sara
— No cierto, Sara ni Carol saben eso...
— Carla tengo que decirte algo...
Espere a que hablara pero no lo hizo, parecía que tenía miedo a decirme algo.
— Vamos dime –le sonreí para animarlo. Suspiro y soltó la bomba.
— No sé cómo decirte esto –Se trabo –Te dije que mis padres hace unos años murieron –Asentí –Y también te dije algo sombre mi hermana verdad...
— Aja...
— Pues mi hermana sigue viva...
— Aja....
— ¿Como se llama? –Pregunte inocente de sucedido.
— Laila Stella
— No puede ser.... –Recordé mis sueños o diría pesadillas.
— Laila.... por fin te puedo tener cerca de mí... hermanita...